Reto / Objetivo
La ciudad reconoció la necesidad de contar con una Plataforma de Ciudades Inteligentes que actuara como centro de recogida y uso de información y datos.
Logroño pretende crecer con varios objetivos
- aumentar la calidad de vida de sus residentes
- garantizar la sostenibilidad económica, social y medioambiental de la ciudad
- que Logroño se convierta en una ciudad más innovadora, competitiva, atractiva y resiliente.
El proyecto "Gestión inteligente de la ciudad de Logroño" consta de muchas herramientas diferentes, como un sistema GIS municipal, el control remoto del alumbrado público, el sistema de riego inteligente, los dispositivos antirrobo para los cables de alumbrado, etc. También forman parte de la Red Española de Ciudades Inteligentes (RECI) y del Pacto de los Alcaldes. La ciudad quería cambiar manteniendo su identidad, fortaleciendo su economía y situando a los ciudadanos en el centro de todas las decisiones y animándoles a participar más. Smart Logroño es un conjunto de soluciones estratégicas para preparar a la ciudad, a sus trabajadores y a todos los proyectos.
Solución
Se identificaron los objetivos y la visión de futuro de la ciudad, queriendo situar a los ciudadanos en el centro de todas las decisiones tomadas y de todo el desarrollo emprendido.
Se definieron tres grupos principales: Infraestructuras y Redes de Comunicación; Centro de Control Integral CCI; y la Plataforma de Gestión Integral de Servicios Municipales - cada grupo asumiendo diferentes tareas.
- El Centro de Control Integral CCI es el símbolo de la integración de recursos que se ocupa del tráfico, el transporte, el alumbrado público, etc.
- Infraestructuras y Redes de Comunicación aporta la necesaria conectividad de las ciudades inteligentes entre personas, dispositivos y sistemas.
- Plataforma de Gestión Integral de Servicios Municipales ofrece Open Data a los ciudadanos, crea relaciones con diferentes colectivos y organizaciones de la ciudad, almacena Big Data relacionado con Logroño entre otras cosas.
Al mismo tiempo que ofrece servicios a sus ciudadanos, la ciudad es capaz de gestionarse de forma autónoma a través de la automatización o con una mínima intervención humana. También es capaz de monitorizar la cantidad de recursos como el agua y la energía utilizados y es capaz de programarse automáticamente para reducir su uso. El sistema avisa de cualquier posible fallo en el servicio, lo que permite a la ciudad trabajar con antelación y ahorrar tiempo.
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