Reto / Objetivo
La ciudad identificó la necesidad de concienciar sobre los hábitos de producción y consumo de nuestro actual sistema lineal. Se desarrollaron una serie de Talleres de Reciclaje de Muebles como forma práctica tanto de concienciar a los ciudadanos sobre la economía circular como de promover su participación activa en una iniciativa circular a nivel local.
El departamento de medio ambiente de la ciudad, junto con el departamento de empleo, formación y desarrollo económico (IMPEFE) querían poner a prueba estos talleres como parte de su intención de:
- Desarrollar un centro de recursos urbanos, promoviendo la economía circular a nivel local mediante un enfoque integral y participativo. - Utilizar la economía circular para lograr un uso eficiente de los recursos, facilitando la reducción de residuos.
- Despertar la conciencia ecológica de los ciudadanos fomentando el reciclaje y la reutilización de residuos.
El Taller de Reciclaje de Muebles tenía como objetivo
- Desarrollar actividades formativas sostenibles en consonancia con los valores medioambientales
- Promover el uso de espacios para el encuentro, el debate y el desarrollo del conocimiento
- Fomentar la promoción de la participación ciudadana en la ciudad
Solución
La acción también esperaba inspirar otras iniciativas alternativas para optimizar los recursos locales de forma económicamente sostenible. El taller se diseñó para promover la participación ciudadana en la reparación, el reciclaje y la reutilización de los muebles recogidos en el Punto Verde de la ciudad y en otros lugares.
En la realización de los talleres colaboraron ciudadanos, empresas y diversos organismos públicos locales y europeos, fomentando la transversalidad y la cultura de la participación ciudadana con la administración.
En la serie de talleres participaron 14 personas de diversas procedencias. Debido a las restricciones de la pandemia, los talleres se organizaron en dos grupos, con 7 participantes por grupo. Parte de las actividades se realizaron conjuntamente, incluyendo visitas al centro de reciclaje del Punto Verde, a una fábrica local de colchones y a la "Casa Museo Municipal Elisa Cendrero" al final del taller.
Los participantes eran 13 mujeres y un hombre, con edades comprendidas entre los 39 y los 70 años. Los participantes tenían diversos niveles educativos, desde el nivel primario hasta licenciados universitarios. La mitad de ellos trabajaban, la otra mitad estaban en paro, en excedencia o jubilados. Los diversos perfiles de los participantes contribuyeron a la riqueza de los debates y las interacciones, y hubo una gran cohesión dentro del grupo.
Participación ciudadana
La participación ciudadana era el principal objetivo del proyecto, mostrar los beneficios de la reutilización y el reciclaje, en este caso de muebles, y cómo puede desempeñar un papel en la economía circular más amplia.
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